GAFAS DE CRISTAL REDUCIDO
No nos gustan las lentes gruesas que sobresalen de las monturas.
Por eso, te explicamos cómo escoger unas lentes de alta graduación finas que se adapten a tu graduación.
Una lente gruesa de miopía, disminuye el tamaño de los ojos creando el efecto "culo de botella".
Ante esta situación, siempre recomendamos una montura pequeña a una grande. En cuanto a la forma, siempre escogeremos la más redonda posible.
Cuando tienes una elevada miopía, los cristales son más finos en la parte central y van aumentando progresivamente el grosor hacia los laterales. Por este motivo, las gafas pequeñas y sin extremos acentuados, disimulan el grosor de la lente.

Lentes de alto índice: El acetato gana al metal.
Las gafas de pasta suelen ser más gruesas que las de metal o titanio. Este grosor nos ayuda a ocultar el borde de las lentes y encaja mejor en lentes de alto índice.
Consejo: Cuanto más gruesa sea la montura, mejor lucirán tus cristales.
Cristales reducidos para lucir
No es solo estética, sino el peso que soportas.
Si sufres miopía, hipermetropía o astigmatismo, a partir de 2 dioptrías es necesario reducir el grosor de los cristales para que tus gafas resulten más ligeras y cómodas. Todo esto se basa en el técnicamente conocido "índice de refracción" de las lentes.
A muchos nos resulta inviable comprar unas gafas de cristal fino a un precio asequible en una óptica tradicional, y nos conformamos con unas lentes más económicas que no se ajustan a nuestras necesidades visuales en su totalidad.
